Adéntrate en las profundidades de la Cueva de Devetashka y vivirás una travesía a través del tiempo en uno de los asombrosos regalos naturales de Bulgaria. Pero esta aventura tiene una condición: ¡no temer a los murciélagos! Alrededor de 30.000 de estos mamíferos alados habitan la cueva.

Esta cavidad kárstica, esculpida por la erosión del agua sobre las rocas carbonatadas, forma parte de un parque público hoy en día. Los vestigios humanos en Devetashka se remontan a la Edad de Piedra temprana, hace unos 70.000 años, y se han descubierto artefactos neolíticos fechados entre los años 6000 y 4000 a.C.

Si eres un apasionado de estas maravillas de la naturaleza, en España disponemos de las cuevas de Valporquero de Torio en León, que te asombrarán con sus amplias salas e historia. ¡No te pierdas estas reliquias naturales y sal a descubrirlas!