Al ser los animales terrestres más grandes de la Tierra, los elefantes africanos, al igual que sus parientes asiáticos, muestran cualidades extraordinarias en su aspecto y comportamiento. Algunos estudios revelan, por ejemplo, que los elefantes pueden reconocerse en el espejo; que las crías de elefante cambian su primer juego de colmillos y dientes; o que estos mamíferos muestran emociones como el dolor cuando pierden a sus familiares. La lista de hechos sorprendentes y maravillosos es enorme. Por desgracia, el Día Mundial del Elefante, que se celebra anualmente el 12 de agosto, no sólo se estableció para admirarlos, sino también para poner de relieve las dificultades urgentes a las que se enfrentan estos animales. El Parque Nacional de Amboseli, en Kenia, donde se tomó esta fotografía, es uno de los pocos hábitats que quedan donde aún se pueden encontrar grandes manadas de elefantes africanos.