En la imagen de hoy, vemos a cuatro mochuelos de madriguera en Wyoming, Estados Unidos, cerca de su madriguera. A diferencia de sus parientes nocturnos, estos pequeñines disfrutan de la luz del día. Estas criaturas poseen una mirada cautivadora con sus ojos amarillos, acentuados por cejas blancas marcadas, mientras su plumaje castaño juega a camuflarse entre la tierra y los pastizales. No es raro observarlo planeando en búsqueda de su alimento favorito: pequeños reptiles e insectos.

Estos pequeños polluelos de patas largas, que no superarán los 23 cm de longitud, se han adaptado a la vida en terrenos abiertos y áridos de América. Su vida subterránea es digna de mención: anidan en madrigueras, algunas prestadas por perritos de la pradera o vizcachas. Familias enteras se acomodan en túneles que alcanzan hasta 2 metros de longitud. Cuando llega el verano en el hemisferio norte, ponen de 5 a 8 huevos blancos y redondos, garantizando la continuidad de la especie. Y tú, ¿conocías estos adorables búhos?